Silver Cross es sinónimo de elegancia, credibilidad y experiencia. El éxito de la empresa y el crecimiento continuo de la marca, se basa en valores como la determinación, la creatividad, el entusiasmo y el amor a la familia. Principios que han definido a la firma desde sus inicios, y que hoy en día, siguen siendo los pilares sobre los que se levanta toda su filosofía.
Fundada en 1877 de la mano del ingeniero e inventor Willian Wilson, la idea era combinar un innovador sistema de suspensión, junto con una práctica capota reversible, el resultado fue un cochecito para bebé tal y como lo conocemos ahora. El éxito fue rotundo, y a partir de ese momento comenzó una etapa revolucionaría en la que Willian Wilson llegó a patentar más de 30 diseños.
El reconocimiento a SILVER CROSS llega en 1900, cuando la Casa Real Inglesa elige sus modelos como primeros coches de paseo para sus bebés. Desde entonces, cada nueva idea, cada novedoso diseño, cada mejora en la fabricación y cada cambio, ha sido para dar respuesta a las demandas y necesidades de padres y niños.
Fundada en 1877 de la mano del ingeniero e inventor Willian Wilson, la idea era combinar un innovador sistema de suspensión, junto con una práctica capota reversible, el resultado fue un cochecito para bebé tal y como lo conocemos ahora. El éxito fue rotundo, y a partir de ese momento comenzó una etapa revolucionaría en la que Willian Wilson llegó a patentar más de 30 diseños.
El reconocimiento a SILVER CROSS llega en 1900, cuando la Casa Real Inglesa elige sus modelos como primeros coches de paseo para sus bebés. Desde entonces, cada nueva idea, cada novedoso diseño, cada mejora en la fabricación y cada cambio, ha sido para dar respuesta a las demandas y necesidades de padres y niños.